La casa pequeña tiene un máximo de tres plazas por lo que es ideal para una pareja o una pareja con un hijo. Se divide en dos plantas. La de arriba está compuesta por una única habitación, con la cama de matrimonio extragrande y la individual en un rincón acogedor, además del baño grande con ducha. Desde ella se accede a una extensa terraza con vistas al jardín. En la parte de abajo encontramos la cocina, completamente equipada, integrada en la sala de estar, y un pequeño aseo.

 

El trabajo de restauración ha sido realizado por nosotros mismos a lo largo de varios años. Dentro, partiendo de la antigua estructura de la casa, encontraran un cuidado trabajo de carpintería y una especial atención a los detalles, que crean un espacio único y con gran personalidad. Al mismo tiempo, hemos tenido siempre en vista la funcionalidad y la confortabilidad, esperamos que se encuentren tan o más cómodos que en su propia casa.

 

En el exterior tienen acceso al patio en torno al cual están construidas las casas. En sus muros podrán contemplar restos romanos (estelas, termino augustal…) y un gran pilón de piedra donde con suerte encontrarán alguna ranita. En la parte de atrás encontrarán el jardín; una zona de césped sombreada con parras, una hamaca y barbacoa; además del gallinero, el huerto y el taller de carpintería.

 

En esta casa podrán desayunar en la terraza mientras los pájaros revolotean, ver las estrellas al caer el sol o quedarte dentro para disfrutar del cálido interior.